Los pendones leoneses
Los días mágicos de octubre por San Froilán
Los primeros días de octubre la ciudad de León se puebla de conmemoraciones históricas, leyendas, milagros y tradiciones al amparo de los paños de los pendones. La antigua capital del viejo reino leonés vuelca su imaginario popular por las calles y plazas, la catedral, los claustros y las iglesias hasta la mismísima basílica de la Virgen del Camino, pendiente arriba a través de Trobajo del Camino, a varios kilómetros de la capital.
Son estas fiestas como un río desbordado de la imaginación para contarnos, en la lengua milenaria y misteriosa de las historias de los filandones, las raíces de una identidad medieval que pregonan y pasean los pendones, desplegados con todos sus colores, en las más de cien varas de dimensiones que alcanzan, en muchos casos, los catorce metros de altura.
Las jornadas de esa semana festiva engarzan una historia fantástica en la página de cada día. La lectura de esa historia se extiende a todos los rincones del Reino de León y los vínculos con sus tierras. Sigue leyendo